Hace
ya varios días que no logro conciliar el sueño… ahora son más de las 3am y
decidí abrir el computador y ponerme a escribir pues mis nervios se van a
cortar en cualquier momento como tensas cuerdas de violín.
No
es que tenga pensamientos coherentes sobre alguna materia en particular. Mi
mente más bien se está convirtiendo en retazos de sucesos o episodios como
jirones de telas distintas, ninguna bonita… trato de gobernar mis pensamientos
y busco en mi memoria ya raída algo bonito o bueno que recordar… y no hay nada.
Sólo cosas feas vienen a mi mente. El temblor de mi boca y de mi mano izquierda
agrava el estado de tensión nerviosa y menos aún puedo así conciliar el sueño.
Ahora siento además que el interior de mi cabeza también tiembla
imperceptiblemente.
Quisiera
tanto que hubiera otro ser humano en mi casa. O que al menos alguien me hablara
por teléfono… quisiera estar en conexión con el mundo, con personas.
Hace
unos días me encontré con un amigo de mi hijo al que no veía casi los mismos
más de 5 años que no lo veo a él. Me contó que está bien, con un buen trabajo,
bien con su pareja… me dijo que tenía en su celular fotos de la pequeña –mi
nieta a quien no conozco- , si quería verlas. Me negué, me dio no sé que
sensación de no querer ver a esa criatura que no conozco.
Me
dijo que mi hijo dice que no volverá, que considera que lo que yo le hice (en
su imaginación) es tan grave que el enojo es para siempre.
Cuando
ya nos despedíamos me ofreció amorosamente si quería mandarle algún recado, le
dije dígale que lo quiero mucho…entré a mi casa y el llanto me inundó el alma y
no pude parar de llorar en dos horas, hasta que me tomé un calmante y me dormí…