Hoy mi hijo cumple 32
años. Por tanto también yo cumplo 32 de haberlo parido. Y no puedo saludarlo. Si
lo intentara, sería para mi mayor dolor. Ya lo he probado y no resulta. Debo mantenerme
lo más alejada posible para no levantar su furia animal y llenarme de malas
energías que afectan mi vida diaria.
Tengo tantas preguntas
para él. Si es feliz, si me recuerda, si me odia, si le soy indiferente, si me
preferiría muerta, si le gustaría verme cómo estoy hoy día… yo por mi parte
quisiera verlo y buscar en él al hijo que fue mío y que un mal día desertó. En fin,
Feliz Cumpleaños Hijo.