Ahora la novedad es que quizá sea Trastorno de personalidad evitativo. He
pasado por bipolar, por depresiòn endógena, por depresión mayor, por doble depresión…
en fin. Esto de ahora no deja de hacerme sentido porque siendo el problema de
base, generalmente se cae en depresiòn. No se sabe porquè se produce ni còmo se
cura, a lo mejor psicoterapia, a lo
mejor una ayuda con antidepresivos.
Y mientras tanto yo hecha polvo, esperando
que encuentren algo que me sirva. Me importa un comino el còmo se llame. Sòlo quiero
sentirme bien. Y en vez de eso me siento cada dìa peor. Cada dìa un nuevo
maldito síntoma sumándose a la ya interminable lista.
Con razón las personas me evitan. Al final mi trastorno evitativo pareciera ser
contagioso. Mientras evito, màs me evitan.
Mi alma està siempre asustada de todo y de
todos. Por eso lo de evitativo. Se supone que en algún momento hubo un daño
venido del exterior y eso causa la conducta evitativa. Màs mejor no nos
acerquemos porque nos puede ir mal. Entonces, si no se tiene la absoluta
certeza de que un otro no te hará daño, te mantienes alejada, asustada y a la
defensiva como leona herida…
Y tanto que necesito personas!! Poquitas pero
valiosas. Y se han retirado, cansadas ya de aguantar mis quejas… Què pena para
mì. Què descanso para ellos.
Si sólo los dos que quedaban no se hubieran
ido, las cosas serìan menos tristes. Pero què hacer! Derechos son derechos. Y en
la elección de amistades, inalienables.
Por evitativa no màs me pasò.
No hay comentarios:
Publicar un comentario