Maldita frase mítica y machista |
Yo
quería otra cosa. Otro hombre. Otro amor. No un príncipe azul. No, de ninguna manera. Sí un hombre sano, equilibrado. Pero me toca ahora éste. Que no me
satisface. Que no me convence. Porque está de por miedo la desconfianza. Y un poco el
miedo. Porque maltrata. Cuando se emborracha.
No
cumple todos los requisitos. Debo y quiero -para que sea mi verdadero amor- sentir hacia él compasión, respeto y
admiración. Y va así
·
Compasión= SÍ. Aunque a ratos le pierdo la paciencia.
·
Respeto= SÍ. Procuro respetar a la gente en
general.
·
Admiración= NO. No trabaja. No se esfuerza. Tiene
vicios.
No me
acepta con mis circunstancias. Eso es grave. Por ahora lo aguanto así pero sé
que llegará el momento en que no quiera más su tácita (y a veces explícita)
prohibición de hablar de mí, de mi asuntos con otros, generalmente mi familia…
eso no está bien. No es generoso de su parte. No puede quererme sola como un
dedo. Soy muy sola, es verdad, pero hay gentes que me acompañan -por último en
el pasado de mi memoria- y tengo pleno derecho a vivirlos. A hablar de ellos. A
contarle mis vivencias. Pero no me deja. Y eso frustra. Y molesta. Y aleja. Si es mi compañero y sobretodo yo no tengo mucho con quien más hablar de mi intimidad, debería escucharme al menos. Pero no, me corta inmediatamente. Quizá
sean celos y/o posesividad, pero no me gusta. No lo acepto. No soy suya.
Tampoco lo amo. Hay que admitirlo. Le tengo algo de cariño, algo de simpatía,
pero amor no.
Por qué
estoy con él? Por probar y conocer antes del final lo que significa compartir
un poco la vida. Sobre todo la vida doméstica. Porque no es lo mismo haber
compartido con un hijo… y que para peor todo haya terminado mal…
No me
molesta su presencia ni su compañía, salvo a ratos, lo normal supongo. Pero no
creo que esto dure mucho. Me veo coartada. No estoy completa. Quizá me
acostumbre a vivir así, por estancos, como lo hacía mi hijo y tanto me
molestaba. Claro que él lo hacía por elección propia, yo por verme obligada
para no tener problemas con este sucedáneo de compañero (sé que suena muy feo,
pero es así porque impide mi libertad).